miércoles, 14 de septiembre de 2011

Aquel momento se marchó.


-Con lo fácil que es cuando somos pequeños. Cuando con 6 años te preguntan eso, tu decides. Si dices que no, los dos sonreis, y os vais a continuar la partida de balón prisionero que llevabais entre manos. Si dices que sí, basta con darse la mano y proclamar al mundo que tienes novio, aunque muchas veces tienes más de uno a la vez... nada serio.
Cuando creces, las complicaciones también lo hacen. ¿Le gustaré? ¿Sigue pensando en ella? ¿Y si sólo somos amigos?...tanto tiempo pensando eso, para luego, ¿qué? No te casas con él, e incluso intentas ocultar que estais juntos.... pasan cuatro días, a lo sumo cinco y la historia se acaba, pero ahora ya no volveis a jugar juntos como de pequeños. Algunas veces intentas jugar en su grupo, recordando las normas del juego una y otra vez, negandose a aceptar que en su grupo, sobras. Otras, te limitas a olvidar, agachar la cabeza, y aceptar la derrota. Aunque, a veces, existen las revanchas.
Pincha aquí para ver esta foto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario